No recuerdo exactamente cuándo lo
pensé por primera vez, dicen que ahí empieza tu camino a Santiago; hubo varios
conocidos que hicieron algún tramo andando, mi hermana Gloria también fue a
acompañar a unas amigas, pero lo definitivo fue que Goyo me dijo que iba a
hacerlo en bici en 2013; desafortunadamente tuvo un problemilla físico y no
pudo ir, con lo que, hablando hablando, le propuse acompañarlo en 2014. Empecé a decirlo a mi entorno cercano y caía
en saco roto, como algo lejano, algo como “ya se le olvidará”, pero no.
Encajamos las vacaciones los dos
para poder salir de Gotor el sábado 12 de julio de 2014. En un principio nos planteamos salir desde
Logroño, un amigo común vive allí y nos pareció un sitio factible para empezar;
al final, echando cuentas, vimos que había un poco más si salíamos desde el
pueblo, y, sinceramente, era mucho más atractivo; fue una decisión fácil,
saldríamos desde Gotor, planeamos tres etapas hasta Burgos que al final fueron
dos, y allí enlazaríamos con el camino Francés.
Empecé a revisar por internet, afortunadamente hay
información de sobra, Goyo es menos previsor que yo, así que, asumí con gusto el
papel de programar todo, disfruté mucho informándome, sigo haciéndolo. La página www.bicigrino.com fue la que más nos ayudó en ruta, de
ahí me descargué un fichero pdf que nos sirvió para elegir alojamiento, para
seguir el camino correctamente, para encontrar un taller para reparar la
bicicleta y para imprimir el mapa que llevé en el manillar desde que llegamos a
Burgos. También llevábamos un fichero
muy extenso que bajamos desde la página web del peregrino de Zaragoza, pero que
solamente utilizamos para informarnos de los datos curiosos, mayormente históricos,
que habían acontecido por donde íbamos pasando.
Preparamos las bicicletas, Goyo
pidió prestado el portabultos y las alforjas y yo los compré. Más tarde ya comentaremos los problemas que
hubo. Dejamos el coche de Goyo en
Zaragoza y el mío lo llevamos a Gotor porque no sabíamos si íbamos a volver al
pueblo o a Zaragoza. Hicimos una lista
de la que íbamos tachando conforme íbamos adquiriendo el material, enviándonos
y reenviando el mismo email modificado.
Si volviéramos a viajar habría varias cosas que no llevaríamos,
principalmente el saco de dormir, porque, solamente nos alojamos un día en
albergue, y podíamos haber dormido mejor con un saco-sábana.
Empezamos:
pedir perdón por la falta de detalles, pero mi memoria es así, quizá tenga
errores en algún dato o alguna localización.
No hay comentarios:
Publicar un comentario